jueves, abril 30

Carpe diem

Me resistí muchísimo de escribir acerca de la influenza y la paranoia colectiva. Si bien, me ha servido muchísimo la cuarentena para poner en orden mis cosas de la casa en la que ya no estaré (y que nunca pude llamar hogar), las advertencias son muy reiterativas y preocupantes, el mundo se va a acabar y mi ciudad se vuelve una ciudad estéril como quirófano. Nomas veo ojos detrás de máscaras quirúrgicas, el azul es el nuevo negro, el señor de la gasolinera me atiende con guantes de látex. Y el virus-is-in-the-air amenazando con exterminar a los no confesados, más cuando el apocalipsis se anuncia cuando sientes que el suelo que pisas se mueve un lunes por la mañana. Solo falta que el Popocatépetl despierte de su larguísimo sueño para demandar un poquito de atención ante semejante crisis existencial. Compras de pánico, ataques de ansiedad, y un sinfín de angustiosos etc´s.
Ni el pánico ni la hipocondriasis se apoderan de mi persona. Mis precauciones no pasan de usar –por obvias razones- un cubrebocas en el hospital y lavarme las manos constantemente y aún así, el miedo no me paraliza, al contrario, creo que he abrazado y besado más últimamente atentando a cualquier protocolo contingente y me doy el chance de vez en cuando de estornudar a propósito en el elevador para divertirme un poco.
3 pm, salgo al aire libre, fuera tapabocas y respiro. “carpe diem” como filosofía se remarca en mis días últimamente…

domingo, abril 12

Malinalco



Salimos 7.15 de la casa rumbo al lugar de mis abuelos.
Bien por mi, vencí el miedo infundado a manejar en carretera y el camino se me hizo muy cómodo con el fresco de la mañana en la Marqueza y mas allá.
Llegamos y caminamos al centro, rumbo al sonido del pueblo recien despierto. Siempre he tenido la sensación de que acá el Sol se muestra mas cariñoso conmigo, me abraza y apapacha y besa con cariño en los ojos y la piel, y me deja toda revitalizada.
Creo que ya era necesaria la escapada y el respiro, entrar de lleno al baúl de mi propia historia para encontrarme, de nuevo, con mi inspiración renovada.

JK

sábado, abril 4

Sobre la Maestría y otras notas...

Las participaciones en clases son tan pretenciosas!!!

Algunas, no todas, muchas son atinadas y certeras y aportan algo al tema que se esta exponiendo y hacen las clases dinámicas... Pero no falta quien cada tres palabras del expositor abre la boca (no alza la mano, o pide la palabra) e interviene, pura paja!! Hace unos días un compañero de clase me invitó un cafe y estuvimos platicando un buen rato, al final me salió con un "no pensé que fueras tan buena conversadora (meaning: no pensé que hablaras tanto!!), en las clases te la pasas calladita" (jejeje, si, aunque no lo crean, soy de las que no dice nada a menos que sea algo que realmente lo amerite en clase, ultimamente, por lo menos).

Las razones por las que no participo son simples y son cuatro: (1) Porque siempre hay alguien quien me roba la palabra y siempre, siempre quiere participar (2) Porque no estoy poniendo atención (como en este momento), (3) Porque no sé del tema (4) Porque me da flojerita (como en este momento, también)

En otras cosas: La colega (referida en mi último post) me tiene en ascuas... después de un mail que me envió el lunes donde decía -entre contracciones- que ya casi llegaba Jack (su bb) no he sabido nada... hoy la intentaré contactar vía skype. Que se me hace queya soy tía y no estoy enterada...

Ya empezó abril y con él la cuenta regresiva... Este fin de semana empezaremos a organizar lo de la empacada (pura logística), tendré que hacer mi visita a los supermercados pa´buscar cajitas...
Lo curioso es: Ayer que empezé a organizar las cosas que me voy a llevar, me dí cuenta que nunca terminé de desempacar, tengo cajas con libros de la universidad sin abrir de la última mudanza hace dos años!!!

Y ya.

JK