Ese cuarto me regaló varias noches de lunes con Jordi Soler leyéndome al oído y a Lou Reen invitándome a despegar un poquito del suelo con Satellite of Love.
Años despues me gusta regresar a casa con Lou, como un buen preludio al descanso despues de trabajar o de una fiesta. Me subo al carro y agarro periferico (o circuito o patriotismo o revolución) sintiendo el despegue.
Rebotan en mí los recuerdos de un mundo mas fácil. Y la levedad me conquista ahora, a pesar de ser fin de domingo.