lunes, julio 27

A quien corresponda:

Desde mis sueños confiscados, las hojas de mi diario arrancadas, las sutilezas de las que presumo con los demás menos contigo, mis estrellas caídas, mis recuerdos en blanco y negro, mis colores más insípidos, mis misterios descubiertos, mis vergüenzas azotadas, mis contrastes anímicos, mis mentiras piadosas...
Desde esta, mi ventana más amplia, donde se asoma la iglesia entre techos de teja y árboles altísimos...
Desde ese lugar incorregiblemente absurdo, me retracto...